Como sabeis me gusta escribir un poco la história de cada tarta, cada una de ellas son un pedacito mío, un poco de mi esencia, de mi creatividad, unas quedan mejor que otras, yo siempre les veo fallitos, que poquito a poco voy mejorando, la práctica lo es todo....
Este es un retazo de história que llena este "diario de abordo pasteril"....
Antonia, abuela orgullosa (y joven cabe decir) de sus nietas Mia e Iris, me encargó una tarta de 3 pisos para el primer cumple de Iris, el último piso era "sin glúten".
Vanesa la mamá de Iris me envió una foto con la idea que tenia en mente, tenia que ser en tonos rosas y con ositos. Y voilà, así fué como quedó
Felicidades pequeña Iris ¡¡
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